عاشوراء
La festividad de عاشوراء tiene lugar el décimo día -de ahí su nombre- del primer mes del calendario musulmán que es مُحرّم. Para los sunníes es un día especial en que se recomienda el ayuno, y como costumbre extendida, -aunque no hay ninguna prescripción religiosa que obligue a hacerlo ese día- muchos musulmanes suelen dar la زكاة (azaque, limosna ritual) ese día en concreto. Es frecuente además que las mujeres y niñas se pinten los ojos con كُحْل (preparado de polvo de antimonio que se usa para maquillarse los ojos), y que los más pequeños reciban juguetes de regalo.
Para los chiíes, sin embargo, esta festividad se vive de muy diferente manera, ya que se conmemora el martirio del imán Hussein, nieto del profeta Muhammad, por lo que es una fecha ligada al dolor y a la tragedia, y por eso en esa fecha, se celebran largas procesiones en las calles en que los fieles se flagelan para demostrar su dolor de forma similar a lo que hacen los penitentes en algunas procesiones de la Semana Santa española.
 

En Marruecos, es costumbre que cuando un vecino te trae algo de comida que ha cocinado, una muestra del banquete que haya celebrado por alguna ocasión especial en su casa, algún producto alimenticio que le hayamos pedido en préstamo por encontrarnos en una emergencia, etc. El recipiente en que nos lo ha traído no ha de serle devuelto vacío, sino con un poco de azúcar, unas frutas, o algo, por poco que sea, sólo para evitar que esté vacío y mostrar así nuestro agradecimiento e intención de retribución.

 

السابع o السبوع
Cuando nace un niño, algunos padres desean
que las primeras palabras que oiga sean
las de la llamada a la oración que se le entona al oído.
A la semana de haber nacido, el séptimo dيa generalmente,
se celebra la ceremonia de asignación de nombre,
llamada السابع o السبوع .
El ritual consiste en sacrificar un animal
y justo en el momento del sacrificio,
pronunciar una fَrmula invocando el nombre de Dios,
además del nombre que se le da al niño.